El kakebo es el método para ahorrar usado por los japoneses que consiste simplemente en una agenda mezclada con una libreta de cuentas, este libro de cuentas es en realidad el libro de cuentas de nuestros padres y nuestros abuelos.
Con la burbuja que hemos vivido y el falso esplendor económico se nos había olvidado hacer cuentas porque no lo veíamos necesario. Ahora, con las vacas flacas, hacer números se ha hecho imprescindible en muchos hogares y el kakebo puede ser nuestro aliado.
Cuando realizamos inversiones, no necesariamente tenemos que estar realizando un seguimiento a diario, por ejemplo viendo las cotizaciones de la bolsa todos los días, depende del plazo al cual realizamos la misma, si la inversión es a largo plazo podemos despreocuparnos más, pero sin llegar a descuidarlas y olvidarnos de las mismas. Las inversiones son como pilotar un barco, donde no podemos dejar el rumbo del mismo como lo fijamos al principio de la travesía sin corregirlo para evitar las desviaciones. Vigilar las inversiones pasa a no ser opcional sino obligatorio.
Cuanto mayor sea el capital que tenemos invertido y superior el riesgo asumido, mayor vigilancia deberíamos ejercer sobre nuestras inversiones.
Pero, ¿que es lo que debemos vigilar de nuestras inversiones?
Ahorrar para la jubilación es difícil dado que significa pararse a pensar en el futuro en un mundo en que es difícil reflexionar más allá del momento actual.
Significa pensar en un futuro que cuando lo imaginamos estamos viejos y con menos fuerza que en el momento actual, pero a pesar de ello planificar este futuro y ahorrar para la jubilación es muy importante, hay que planteárselo como una recompensa que nos dará una mayor calidad de vida en el momento de retiro. La tranquilidad de vivir esta nueva etapa de retiro sin la necesidad de preocuparte por el dinero y la estabilidad financiera o tener que depender de familiares o amigos es muy importante.
