Cuando realizamos inversiones, no necesariamente tenemos que estar realizando un seguimiento a diario, por ejemplo viendo las cotizaciones de la bolsa todos los días, depende del plazo al cual realizamos la misma, si la inversión es a largo plazo podemos despreocuparnos más, pero sin llegar a descuidarlas y olvidarnos de las mismas. Las inversiones son como pilotar un barco, donde no podemos dejar el rumbo del mismo como lo fijamos al principio de la travesía sin corregirlo para evitar las desviaciones. Vigilar las inversiones pasa a no ser opcional sino obligatorio.
Cuanto mayor sea el capital que tenemos invertido y superior el riesgo asumido, mayor vigilancia deberíamos ejercer sobre nuestras inversiones.
Pero, ¿que es lo que debemos vigilar de nuestras inversiones?